¿Qué es una burbuja de precios?

Las burbujas de precios de un activo en concreto (también llamadas “especulativas”) se producen principalmente por una subida anormal de los precios de un activo por circunstancias exógenas. Es decir, cuando determinadas circunstancias confluyen, se produce un incremento del precio del activo (no su valor) de una manera incontrolada y prolongada en el tiempo, generando una burbuja de precios.

Por ejemplo, en nuestro sector se han verificado en poco tiempo varias circunstancias que han producido esta burbuja de precios, como el crecimiento del sector veterinario durante la pandemia y la entrada de varios inversores interesados en comprar hospitales y clínicas veterinarias.

En este momento y desde el verano del 2021, se están pagando precios increíbles para clínicas y hospitales veterinarios y muchos propietarios se preguntan “¿Debo vender ahora o esperar a que mi clínica valga más?”, “¿Explotará esta burbuja?”, “¿Cuándo explotará?” …y la realidad es que es imposible predecir todas estas respuestas.

La incertidumbre, junto al sentimiento generalizado de los propietarios de que realmente la burbuja estallará pronto, inevitablemente crea el sentimiento de prisa y agobio por pensar en dejar algo de dinero encima de la mesa y no arrepentirse de ello toda la vida.

¿Ha llegado el ápice de la burbuja y el momento de los precios máximos?

En los últimos años, los inversores han descubierto la seguridad relativa de los activos en el sector veterinario: la demanda de propiedad de la clínica veterinaria es alta y la disponibilidad es baja. Además, la profesión veterinaria es muy resistente a las fuerzas de recesión.

A pesar de esto, creemos que la burbuja está llegando a su ápice, y de hecho los precios han comenzado a bajar desde mayo del 2022. Los grupos consolidadores liderados por los fondos de inversión están invirtiendo ampliamente en España pero cada vez con más cuidado.

Hay 3 razones que han generado el incremento de precios del sector veterinario:

1. Concurso de Mercado: como todos sabemos, los fondos de inversión han descubierto la seguridad de la inversión de nuestra profesión y están pagando múltiplos EBITDA de aproximadamente 8 a 18. Con estos múltiplos, es difícil para el propietario de la clínica rechazar este tipo de precios. A pesar de estar pagando estos precios y debido a su estructura, los grupos son capaces de generar beneficios suculentos para los fondos que tienen detrás.

• Los factores de riesgo involucrados. Vemos que el riesgo de propiedad de la clínica veterinaria ha disminuido significativamente. Este menor riesgo de inversión garantiza una menor tasa de retorno (mayor múltiplo EBITDA), es decir, un valor más alto.

• Influencia en términos de financiación: en cuanto al precio real, los prestamistas y las partes de transacción están involucradas en este punto, y todo tiene que ver con el flujo de efectivo neto ajustado. Los prestamistas de hoy están comenzando a ignorar una proporción máxima a precio a bruto si todo lo demás califica.

Subasta o negociación

El mundo de las fusiones y adquisiciones se divide en dos grandes campos: las ventas negociadas y las subastas.  Aunque son similares, las subastas y las ventas negociadas tienen algunas diferencias clave.

Una subasta es un proceso de venta comercial en el cual un grupo de compradores hace su oferta y el vendedor se dirige a la mejor oferta.  Entonces, ¿qué significa la mejor oferta?  En la mayoría de los casos, la mejor oferta es el precio más alto, pero los vendedores también examinan otros factores, como por ejemplo la capacidad del comprador para cerrar un trato o qué parte del precio de venta es en efectivo y cuándo el vendedor recibirá ese dinero.

Por ejemplo, digamos que el vendedor está examinando dos ofertas:

1. Una oferta tiene un valor de total de € 10 millones, con € 1 millón al cierre y € 9 millones en forma de promesa de pago posterior.
2. La otra oferta es por € 5 millones, todo al cierre.

¿Cuál es la mejor oferta?  Quizás la primera oferta (valor total de € 10 millones) es más atractiva, siendo más dinero.  Pero dependiendo de la situación, la segunda oferta, aunque sea más baja, puede tener más sentido; tal vez el vendedor esté dispuesto a renunciar a un precio potencial más alto por la certeza de más dinero a corto plazo.

Una venta negociada ocurre cuando el vendedor (o el asesor del vendedor) habla con cada comprador y tal vez adapta el discurso para resaltar los beneficios que serán más atractivos para cada comprador individual. Una venta negociada todavía tiene elementos de una subasta (numerosos participantes que hacen ofertas), pero implica mucho más control por parte del vendedor.

Cual de los dos procesos es el mejor depende de la situación.  Por lo general, una subasta funciona mejor para empresas más grandes y conocidas. Una venta negociada funciona mejor para empresas más pequeñas o empresas con pérdidas o escasas ganancias.